Touma entra al centro de curación y comienza a camina hacia
la sala de Kenji. El se encontraba acostado, leyendo una revista
_ ¡Oh!, ¿Touma?, ¿Cómo te va? – Pregunta Kenji felizmente
_ No muy bien, por eso he venido contigo, quiero que me
respondas varias cosas, Padre – Explica Touma, el rostro de Kenji se pone serio
y deja la revista en un mueble allí cerca
_ Cierra la puerta – Exclama Kenji
Touma se acerca y lentamente cierra la puerta
_ ¿Que clase de preguntas son esas? – Pregunta Kenji
_ ¿Quién eres?, ¿Que soy yo?, ¿Que tienes que ver tu con el Infarmento?
_ Savia que este momento tenía que llegar algún día, lo
siento pero las primeras dos preguntas las dejare pasar, ¡debes descubrirlo por
ti mismo!, ¡yo no puedo decir nada! – Explica Kenji
_ ¡No me jodas! – Grita Touma furioso
_ ¡Cálmate!, ¡debes descubrir por
ti solo quien eres!, ¡no te preocupes!, ¡no falta tanto!
_ ¡No me voy a calmar y una mierda!,
¡responde padre!, ¡¿Quién soy yo?! – Grita Touma
Kenji realiza un movimiento rápido
y coloca una pistola justo en la frente
de Touma, el queda paralizado
_ ¿Quieres saber quién eres? ¡Entonces
muere!, ¡allí encontraras la respuesta!, ¡pero no me vengas con tales mierdas!,
¡Toma! – Exclama Kenji mientras sigue apuntando su arma a la frente de Touma
Touma da la vuelta, abre la puerta
y lentamente sale de la sala, Kenji baja el arma y se acuesta nuevamente en su
camilla. Touma comienza a bajar por las escaleras para salir del centro de curación,
cuando escucha un fuerte ruido detrás suyo, rápidamente da vuelta su cabeza, había
sido una explosión, todo detrás de él estaba consumido en llamas, las personas caían
al suelo envueltas en fuego que quemaba toda parte de su cuerpo, no lo podía creer.
Sin pensarlo dos veces entro a las
llamas y corrió hacia la sala de Kenji, él se encontraba en el suelo, estaba
muy herido, pero no moriría. Touma lo levanto en sus brazos y lo llevo a una
esquina de la habitación. En ese momento se escucharon unas voces, Touma se asomó
a la puerta, eran los enmascarados, lo habían encontrado, Touma materializo una
cuchilla y corrió detrás de ellos, algunos intentaban dispararle, pero era
demasiado rápido, los cuerpos se acumulaban rápidamente y la sangre embarra las
paredes y el suelo.
Cuando ya parecían haber muerto
todos, Touma corrió hacia la habitación, y lo que vio fue algo que nunca se borrara
de su cabeza, todavía quedaba un hombre, él se encontraba en la puerta de la sala
de Kenji, apretó el gatillo y comenzó a correr, Touma se lanzó sobre él, lo
golpeounas cuantas veces en el rostro, tomo su cuchilla y abrió su cuello en dos,
dejando al cadáver con un enorme hueco en su garganta.
Touma se levantó del suelo y corrió
hacia la sala, cuando entro pudo
observar el cuerpo de su padre, con un hilo de sangre colgando de su boca, sus
ojos lloraban y tenía una gran sonrisa en el rostro, con su mano izquierda
tapaba lo que par3ecia ser una herida, Touma quedo paralizado, estaba a punto
de morir.